Señor, yo sé que el hombre
no es dueño de su destino,
que no le es dado al caminante
dirigir sus propios pasos.
(Jeremías 10:23)

El hombre es como un viajero guiado por una brújula rota, caminando en círculos o yendo en la dirección equivocada. Trata de seguir lo que cree correcto, pero camina en vano. Sus pasos son en vano porque está perdido. Esta brújula rota es el corazón del hombre, que va guiándolo en cualquier dirección.

El verdadero norte y guía de nuestra vida es Dios, solo él conoce el camino correcto a la vida eterna. Seguir los pasos de Jesús es seguir el verdadero camino de la vida, por eso debemos estar atentos a sus enseñanzas.

Toma la Biblia y dedícate a conocer a Jesús. Él es el camino, la verdad y la vida, vale la pena conocerlo. Deja que el Señor dirija tus pasos, entrégale tus caminos para que tu futuro sea seguro y en paz.

Anda con cuidado

• Antes de tomar tus decisiones, ora y pregúntale a Dios si esto es lo que él quiere.
• Busca en la Palabra de Dios principios que te ayuden a caminar en la vida.
• Conoce a tu Señor, el camino correcto a la eternidad.

Para orar:

Señor, mi Señor y Padre, te pido que me guíes y me sustentes en este camino llamado «vida». Quiero tu ayuda y liderazgo para poder superar todos los desafíos que el mundo me pone por delante. Te pido que me ayudes a contener mi corazón cuando señala un camino diferente al tuyo. En el nombre de Jesús, ¡amén!